"Corruptos paguen a la gente".
La frase, escrita en letras rojas con aerosol, se lee en uno de los ventanales de la confitería, ubicada en Rivadavia y Corrientes. Los empleados denunciaron que la empresa concesionaria Warstreet SA les adeuda los sueldos de abril y mayo y además se niega a indemnizarlos como estipula la ley.
"De la noche a la mañana la compañía les comunicó a los empleados que iban a dejar de trabajar porque no le estaban dando los números", dijo el secretario general del Sindicato de Pasteleros, Carlos Vaquero. Ante esta situación, los empleados de la confitería decidieron ocupar el espacio de trabajo, con el respaldo de las autoridades del gremio que se hicieron presentes para acompañar a los trabajadores. La delegación estuvo encabezada por el secretario gremial, Héctor Rojas, y el subsecretario José García, entre otros.
"Nos vamos a quedar acá hasta que nos den una solución. Queremos que se mantengan las fuentes de trabajo o, de lo contrario, que nos paguen la indemnización que nos corresponde. Estamos esperando una respuesta de la empresa, hoy podríamos tener novedades. Ojalá que tengamos noticias alentadoras", afirmó Darío Suárez, empleado de la confitería.
Los trabajadores agradecieron el apoyo y acompañamiento de los funcionarios del Ministerio de Trabajo "y los compañeros" del sindicato de Pasteleros. "Vinieron a respaldarnos ante la posibilidad de cierre. Nosotros somos gente de trabajo y sólo queremos poder realizar nuestra tarea?, coincidieron los empleados. Y enseguida agregaron: "Todos los vecinos del centro también nos están apoyando en el reclamo, nos dicen que no bajemos los brazos y que sigamos luchando por nuestra fuente de trabajo".
Los empleados aclararon que la protesta es pacífica. "Solamente estamos reclamando lo que consideramos justo -explicaron-. No nos veníamos venir esta situación del posible cierre, nos tomó por sorpresa la postura de la empresa. Esperemos que el conflicto se destrabe para que podamos seguir trabajando".
"De la noche a la mañana la compañía les comunicó a los empleados que iban a dejar de trabajar porque no le estaban dando los números", dijo el secretario general del Sindicato de Pasteleros, Carlos Vaquero. Ante esta situación, los empleados de la confitería decidieron ocupar el espacio de trabajo, con el respaldo de las autoridades del gremio que se hicieron presentes para acompañar a los trabajadores. La delegación estuvo encabezada por el secretario gremial, Héctor Rojas, y el subsecretario José García, entre otros.
"Nos vamos a quedar acá hasta que nos den una solución. Queremos que se mantengan las fuentes de trabajo o, de lo contrario, que nos paguen la indemnización que nos corresponde. Estamos esperando una respuesta de la empresa, hoy podríamos tener novedades. Ojalá que tengamos noticias alentadoras", afirmó Darío Suárez, empleado de la confitería.
Los trabajadores agradecieron el apoyo y acompañamiento de los funcionarios del Ministerio de Trabajo "y los compañeros" del sindicato de Pasteleros. "Vinieron a respaldarnos ante la posibilidad de cierre. Nosotros somos gente de trabajo y sólo queremos poder realizar nuestra tarea?, coincidieron los empleados. Y enseguida agregaron: "Todos los vecinos del centro también nos están apoyando en el reclamo, nos dicen que no bajemos los brazos y que sigamos luchando por nuestra fuente de trabajo".
Los empleados aclararon que la protesta es pacífica. "Solamente estamos reclamando lo que consideramos justo -explicaron-. No nos veníamos venir esta situación del posible cierre, nos tomó por sorpresa la postura de la empresa. Esperemos que el conflicto se destrabe para que podamos seguir trabajando".
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