La resolución fue publicada en el Boletín Oficial con la firma de Cristina Fernández. También se incluyeron al hotel Termas de Villavicencio de Mendoza y Embalse de Río III de Córdoba.
Por decreto 784/2013, publicado este martes en el Boletín Oficial, los complejos turísticos Chapadmalal de provincia de Buenos Aires, el hotel Termas de Villavicencio de Mendoza, y Embalse de Río III de Córdoba fueron declarados monumentos históricos nacionales. Además, se otorgó el título de bien de interés histórico nacional a la primera vivienda familiar de Carlos Gesell, ubicada en la ciudad balnearia que lleva su nombre.
La propuesta tiene como objetivo resaltar el valor histórico de estos sitios y fue realizada por la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación. El decreto lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández, del jefe de Gabinete, Juan Abal Medina y del ministro del Interior y Transporte,Florencio Randazzo.
El decretó precisó que la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos realizará las inscripciones correspondientes en los registros Catastrales y de la Propiedad Inmueble e incluyó al complejo turístico bonaerense Chapadmalal en la Provincia de Buenos Aires; al de Embalse de Río III, situado en el departamento de Calamuchita, en el municipio cordobés de Embalse; y al hotel Termas de Villavicencio y sus construcciones complementarias, incluida la capilla neocolonial, ubicada en el kilómetro 51 de la ruta provincial 52, en Capdevilla, departamento Las Heras, en la provincia de Mendoza.
En los considerandos, la disposición resaltó que la aparición de los primeros sitios turísticos en la Argentina “destinados a las clases sociales altas se deben a la iniciativa de la sociedad civil que, a través de emprendimientos particulares y familiares, construyeron ciudades balnearias a imagen y semejanza de los balnearios europeos, a fines del siglo XIX” y destacó que el desarrollo del ferrocarril “favoreció la creación de destinos turísticos”.
En este marco, se señaló que durante las primeras décadas del siglo XX, a partir de la difusión de las propiedades curativas de las aguas termales, se genera la aparición de hoteles y lugares de descanso dedicados a este fin, en las cercanías de las fuentes. Entre este tipo de establecimientos se destaca la construcción en el año 1940 y en tan solo seis meses, del Hotel Termas de Villavicencio, en la Provincia de Mendoza, convirtiéndose en uno de los principales de su tipo.
Por otra parte, tras la consolidación de Mar del Plata como destino turístico, aparecen otros balnearios alternativos, que se fundan hacia el norte de esa localidad sobre la costa bonaerense, entre las que resalta la labor desarrollada por Carlos Idaho Gesell en la forestación de dunas marinas, dando lugar a la fundación de una villa balnearia que lleva su nombre.
El decreto, también, recordó que el turismo social floreció en la Argentina desde 1945, consolidándose esta idea que había comenzado en la década del ‘30. A partir de ese momento se reconoció el derecho a las vacaciones dentro de los derechos del trabajador.
En este contexto, el sector público creó una importante infraestructura de servicios y desarrolló propuestas de turismo social destinados a grupos familiares, niños y personas mayores, gestionando directamente sus propios establecimientos. La instalación de hoteles económicos en distintas zonas del país destinados, en principio, a los servidores del Estado y familiares, tenía como finalidad el goce de las vacaciones anuales en lugares adecuados, sin incidir mayormente en sus presupuestos familiares, propiciando el conocimiento del territorio nacional.
Así fue que entre los años 1946 y 1955 el turismo estuvo encarado en tres formas que se vinculaban entre sí: el centrado en las colonias de vacaciones y/u hoteles administrados por la Fundación Eva Perón, como Chapadmalal, Río Tercero y Mendoza; y los contratos entre la institución y el gobierno bonaerense con la esfera privada para albergar a contingentes de niños y maestros y los primeros hospedajes y hoteles de las organizaciones obreras y sindicales.
UNIDAD TURÍSTICA DE CHAPADMALAL
En 1945, el Estado Nacional destinó un crédito especial que dio lugar a la construcción de los centros turísticos de Chapadmalal y Embalse de Rio III.
La Unidad Turística de Chapadmalal fue construida sobre tierras fiscales pertenecientes a la Provincia de Buenos Aires, y tierras expropiadas a la Estancia Chapadmalal, perteneciente a la familia Martínez de Hoz. Fueron inaugurados en 1950 sobre la ruta interbalnearia Nº 11, a 30 kilómetros de Mar del Plata y 15 kilómetros de Miramar.
El complejo está formado por 19 bungalows y 9 hoteles, de los cuales dos son de categoría “A”, seis de categoría “B” y uno para niños de 6 a 12 años.
Entre sus servicios se encuentran servicios de uso común como correo, telefonía, centro de asistencia con farmacia, cine-teatro, galerías comerciales, una confitería bailable, centros recreacionales para niños, una capilla y una ermita para la administración. Además, funciona el Museo Unidad Turística Chapadmalal “Eva Perón”.
Tanto el proyecto de la Colonia Chapadmalal como el de Embalse de Rio III fueron llevados adelante por el Ministerio de Obras Públicas dirigido en ese entonces por el General Juan Pistarini y responden a una tipología edilicia común, denominada “pabellonaria” que en aquella época se comenzaba a utilizar para los edificios públicos.
Entre los materiales utilizados se encuentran algunos importados de Europa, como la cerrajería y plomería, y otros de origen nacional, como los ladrillos y la piedra de la zona, y la carpintería de madera argentina.
Por su parte, la Unidad Turística de Embalse de Río III está conformada por siete hoteles divididos en dos categorías y cincuenta bungalows ubicados en medio de un bosque de pinos y paraísos La estructura de sus construcciones es de hormigón armado, con mampostería de ladrillos y piedra, frente de ladrillos a la vista y cubiertas de teja tipo colonial. Además, cuenta con un complejo polideportivo, un campamento turístico, una hostería, vestuarios y pileta, servicio médico permanente, pabellón para el personal de servicio, refugio para veraneantes, farmacia, capilla, ermita, torre tanque, panadería, destacamento policial, pabellones de servicios, administración central y kioscos de distintos tipo.
