viernes, 12 de abril de 2013

En octubre se inaugurará el Museo Provincial de Arte Contemporáneo. Lo confirmó el presidente del Instituto Cultural, Jorge Telerman, al destacar la “transparencia ejemplar” del proceso de construcción del edificio, emplazado sobre la ex Canchita de los Bomberos.

En seis meses a partir de ahora, y según las estimaciones del presidente del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, Jorge Telerman, la anhelada y ambiciosa obra del Museo Provincial de Arte Contemporáneo (MPAC) dejará de ser un proyecto para transformarse en una realidad. Es que, según dijo el funcionario, el espacio quedaría inaugurado en su totalidad en octubre de este año.
En ese sentido, Telerman aseguró que el museo “es la obra más importante que se está haciendo en materia cultural en el país”, al tiempo que recordó que se trata de un trabajo “de gran envergadura que, coordinado por la Dirección Provincial de Arquitectura, del Ministerio de Infraestructura, se realiza en un predio de 7 mil m2 frente al mar, en el ingreso costero a la ciudad”.


Sobre los plazos de construcción, el titular del Instituto Cultural precisó que los mismos avanzan “tal como se había previsto” y que, por eso, para octubre de este año todos podrán disfrutar del museo. Además, destacó la “transparencia ejemplar” del proceso de construcción.

Asimismo, el funcionario bonaerense recordó que los arquitectos que diseñaron el museo (Monoblock) “son jóvenes muy talentosos que no sólo están construyendo en tiempo y forma sino que también lo hacen con equipamiento de última generación”. “Estos profesionales participaron de un concurso abierto y de la misma forma, con un jurado de renombre, se elegirá a la persona más idónea para dirigirlo”, adelantó.

Para completar, Telerman se brindó algunos detalles acerca del proyecto y comentó que el museo contará “con un archivo único, recibirá a grandes artistas, con obras innovadoras y muy importantes, será sede de coloquios”. “Este espacio apunta a sumar nuevas propuestas culturales a las que se ofrecen en Mar del Plata, y que sean para todo el año, para los turistas y para los marplatenses”, afirmó. Y luego entendió: “Queremos que sea un museo que ensanche las condiciones cada vez más amplias de acceso a un derecho fundamental, como es el acceso a los bienes culturales”.

LA CONSTRUCCIÓN

En agosto de 2009, el estudio Monoblock ganó el primer premio en el Concurso Nacional de Anteproyectos convocado por el Ministerio de Infraestructura de la provincia de Buenos Aires, para desarrollar el MPAC en la ciudad. Con una inversión de 56.187.812,72 pesos, esta unidad se está construyendo en el predio popularmente conocido como “Canchita de los Bomberos”, en la zona norte de la ciudad y frente al mar.

El Organismo Nacional de Administración de Bienes (Onabe) cedió a la Provincia, en febrero de ese año, las manzanas delimitadas por las calles Florisbelo Acosta, López de Gomara, Dardo Rocha y avenida Félix U. Camet, a menos de 500 metros de la intersección de la avenida Constitución y el paseo costanero.

Puntualmente, y de acuerdo a lo que explicaron desde el estudio, el proyecto incluye tres grandes salas de exposiciones en una planta elevada: una de 20 x 30 metros y las otras dos de 20 x 20 con una altura libre de 9 metros. Los arquitectos a cargo de la iniciativa, avanzaron con la idea de una unidad que pueda albergar muestras de arte de gran prestigio, y en función de eso, se tomó la decisión de maximizar un ambiente de sala de lo más espacioso, luminoso y flexible, que en su configuración ofrezca una riqueza espacial que permita imaginar este edificio como un referente claro en la actividad cultural de toda la ciudad y alrededores.

Así las salas se ubicaron en una planta alta para aprovechar la gran especialidad de la que disponen y de la posibilidad de iluminarlas cenitalmente, configurando un gran volumen diáfano como ámbito contemporáneo de exposición. En su ampliación, el museo propone una neta separación de tipología de uso manteniendo en planta alta la tipología de sala de iluminación cenital para exposiciones visuales, y en planta baja la incorporación de grandes salas “galpón” flexibles, preparadas para grandes espectáculos masivos con accesos diferenciados en el exterior, o salas mas pequeñas aisladas para distintas muestras audiovisuales.

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