Hace 35 días que el hall del edificio del Consejo Escolar está tomado en reclamo de mejoras edilicias para los establecimientos. Y los estudiantes tienen decidido continuar allí hasta que aparezca “un plan concreto de obras por escrito”. Así lo ratificaron en una nueva asamblea. Mientras tanto, en la escuela Piloto este lunes decidieron levantar la toma ante la promesa concreta del arranque de obras (ver notas relacionadas).
En la asamblea de este lunes en la que participaron, como siempre, alumnos de distintos establecimientos, estudiantes terciarios que apoyan el reclamo y algunos autoconvocados, uno de los temas tratados fue la necesidad de mantener la unión y el compañerismo.
“Quieren que nos peleemos”, expresó uno de los estudiantes. Los más de 30 días de toma vienen provocando una situación de desgaste que ha desatado, por ejemplo, que buena parte de las escuelas que se habían sumado a la protesta, levante la toma.
“Acá hay responsabilidad de la Nación, la Provincia y de la Ciudad”, sostuvo Laura, una estudiante terciaria que se unió al reclamo desde el primer día. Ella, como la mayoría de los que están ahí, pasa buena parte del día en el Consejo.
Uno de las cuestiones que volvieron a denunciar fue la “intimidación” que llevan adelante contra ellos “patrulleros y patotas agresivas que recorren las escuelas tomadas”. Según contó Laura, varias veces al día ellos recorren la zona del Consejo “por seguridad”. “En la parte del Consejo funciona hay policías desde que arrancó la toma”, sostuvo.
Como parte de las acciones que decidieron para continuar con el reclamo, se encuentran varias movilizaciones. Una de ellas fue programada para este martes a partir de las 9. Se concentreror en el Instituto Polivalente de Arte (IPA) y marcharon hasta la Municipalidad. Este miércoles, por la tarde, también realizarán una marcha que partirá desde el mismo lugar y concluirá en el Hotel Provincial, “simbolizando la responsabilidad de la Provincia”, explicaron.
Según anunciaron los estudiantes, también se llevará a cabo una “asamblea en la Facultad de Humanidades donde se va a votar si se toma o no ese edificio”. Al respecto analizaron: “Que se esté discutiendo ahí es importante porque es nacional”.
UN MES DE RECLAMO
Tras el mes de protesta que se cumplió el viernes pasado los estudiantes emitieron un comunicado en el que repasaron el conflicto desde el principio y reafirmaron los puntos por los que llevan adelante la lucha hace más de 30 días.
Principalmente hicieron hincapié en “el déficit presupuestario de la educación pública”. Y enumeraron reclamos que mantienen desde hace tiempo alumnos y docentes: “Mejoras edilicias, boleto gratuito para la totalidad de los integrantes de la comunidad educativa, recorte a los fondos de los comedores escolares, incremento de salarios, pago de salarios adeudados y eliminación de la precarización laboral”.
Tras ellos destacaron que “muchos de esos reclamos ya habían sido presentados en movilizaciones en septiembre del año pasado y desde hace años por notas que son siempre archivadas”.
En el comunicado también señalaron que “la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia, con el acompañamiento de la conducción del gremio Suteba y el Consejo Escolar, intentaron destrabar el conflicto entregando algunos mobiliarios y arreglos menores, lo cual fue un logro de las tomas, ya que, aunque (fueron) insuficientes, eran reclamos de largos años incumplidos”.
Además repasaron que el primer encuentro con autoridades los mantuvieron el 30 de mayo, 13 días después de iniciada la toma. Allí consiguieron, entre otras cosas, “el compromiso de entregar un plan de infraestructura para el distrito (uno de Contingencia y un Plan Maestro para las grandes obras estructurales). Al día de hoy esos planes de infraestructura no han sido presentados y los funcionarios siguen sin cumplir con la reunión pautada para el día miércoles 5 de junio”.
Tal como lo sostienen desde el primer día, manifestaron que “es una necesidad para el distrito la existencia de un plan de infraestructura, ya que las instituciones educativas se encuentran en muy mal estado producto del ajuste en la educación, situación que atraviesa a todo el sistema educativo público, en todos sus niveles, a lo largo del país”.
Por otra parte, denunciaron -como ya lo habían hecho en su momento- que “junto con la falta de respuestas, padres en contra de la toma junto con patotas del Gobierno entraron a patadas, piñas y martillazos contra los estudiantes en la EES 46, amenazas y aprietes en otras escuelas, roturas de vidrios desde afuera, amedrentamiento de la policía y bombas molotov arrojadas contra la EES 1 (la Piloto)”.
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