Ante una pérdida de gas en una escuela, piden que intervenga el Consejo Escolar.

La situación se da en una primaria del Boquerón, donde se brinda almuerzo a unos 300 chicos. Si no hay respuestas, podría paralizarse el servicio para preservar a trabajadores y alumnos. 

Días después de la explosión de un termotanque en un jardín de infantes de La Peregrina, dirigentes y delegados de ATE, en conjunto con autoridades directivas, volvieron a realizar una presentación ante el Consejo Escolar por deficiencias en la cocina de la escuela primaria Nº 23, donde aseguran que existe una pérdida de gas.

Carlos Díaz, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), marcó la situación como de “suma gravedad”. El edificio situado en el kilómetro 23 de la ruta 88, en el Paraje El Boquerón, es compartido también por los alumnos de la secundaria Nº 57. Entre los dos establecimientos, unos 300 chicos y chicas asisten al comedor que allí funciona.

“La pérdida de gas se da en las conexiones de la cocina, mostrando explosiones mientras funciona debido a que una hornalla no cierra correctamente”, sostuvo el dirigente gremial, quien mencionó que también se pidió la revisión de un termotanque que no funciona y de otro que lleva mucho tiempo de uso.

Díaz indicó que desde el Departamento de Salud Laboral, cuando se presentan estas situaciones, enseguida se eleva el reclamo ante el área correspondiente.

En este sentido, planteó la importancia de contar con Comités Mixtos de Seguridad e Higiene que hoy están contemplados en la ley provincial 22.446, impulsada por los trabajadores, pero que no fueron creados en los distintos distritos. “Contar con un comité en General Pueyrredon permitirá atender las problemáticas y dar una respuesta rápida ante los reclamos”, contempló Díaz, quien adujo la demora en su creación a la “falta de voluntad política de las autoridades”.

En relación a la situación de la escuela 23, recordó que hace veinte días se había hecho una presentación ante el Consejo Escolar que el lunes se repitió ante la falta de respuestas.

En caso de que la negativa a solucionar la pérdida de gas continúe, Díaz alertó que puede paralizarse el servicio del comedor escolar “para preservar la vida de los trabajadores y los pibes que asisten a la escuela”. “De la misma manera sugerimos que suceda con el dictado de clases ya que es una medida de prevención. Prevención es entender que si un incidente es evitable deja de ser un accidente”, sostuvo el dirigente.