Tras permanecer cerrado durante siete meses y realizarse tres audiencias, la Cámara de Apelaciones dispuso la reapertura del Centro Cerrado de Menores de Batán.
Todavía quedan algunas cuestiones sin resolver, a pesar de eso, es inminente que comience a alojar menores nuevamente.
La Cámara confirmó la resolución de clausura dispuesta en primera instancia por la jueza Silvina Darmandrail, ya que reafirmaron que el instituto no contaba con las condiciones de habitabilidad ni de seguridad necesarias para poder funcionar.
Ahora, consideran que ha cambiado la situación y detallan cinco puntos resueltos que se encontraban entre los pedidos.
El primero, es que se ha agregado una sala más para el entretenimiento de los internos, tal como se había pedido. Además, se compraron colchones ignífugos.
Segundo, durante los meses que el instituto estuvo cerrado el personal realizó cursos de capacitación para aprender a trabajar con menores en conflicto con ley.
En tercer lugar, los menores podrán optar por realizar cursos de bijouterie, cerámica, trabajo con cuero o con madera. Esto último no es exactamente lo que se había pedido, ya que lo que se solicitaba es que los jóvenes pudieran aprender un oficio con salida laboral.
En cuarto lugar, se garantiza que se brindará educación primaria y secundaria a los internos.
Por último, se determinó que la seguridad estará a cargo de la jefatura Departamental con el sistema de “servicio polad o adicional” y será controlada por la comisaría octava. Habrá 4 policías en el Cerrado y 3 en el Centro de Recepción.
En el tema seguridad, todavía está pendiente hacer las garitas donde estarán los efectivos custodiando en puntos claves.
Por otra parte, se dispuso que la Fiscalía General investigue si se manejaron de forma irregular las horas polad antes de la clausura.
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