El presidente del bloque de la Agrupación Atlántica, Carlos Arroyo, propuso al Concejo Deliberante modificar completamente la forma en que se confecciona y se ejecuta el Presupuesto municipal, para implementar el “Sistema de Planificación y Presupuesto en Base Cero”. El proyecto de ordenanza establece una prueba piloto para las secretarías de Educación y Salud para el ejercicio 2014 y su puesta en marcha para toda la administración, para el 2015.
Para sostener la propuesta, fue el contador José Cano -comparte lista con Arroyo en estas elecciones- quien elaboró un pormenorizado informe de la situación económica y financiera de la Comuna. Sin vueltas, sentenció que más allá de los intentos por “maquillar” algunas circunstancias, “los indicadores de la gestión Pulti son los peores de los últimos 15 años”.
Para remediar esta supuesta falta de transparencia, desde la Agrupación Atlántica instaron a aplicar un mecanismo que requiere “la total y detallada justificación de las erogaciones a partir de su origen” y no como “incremento de presupuestos anteriores”.
Así, el concepto de Presupuesto Base Cero indica que es una herramienta de dirección “que posibilita el mejor uso de los recursos para la obtención de objetivos preestablecidos, a través de la evaluación y revisión sistemáticas de prioridades y alternativas”.
El análisis realizado por el contador no arrojó cifras alentadoras. Según Cano, el Municipio tiene un déficit superior a los 200 millones de pesos, al tener en cuenta los resultados –negativos- obtenidos entre los años 2008 y 2012, producto de la diferencia entre los ingresos y los egresos en la administración de Gustavo Pulti.
Un dato relevante, siempre según los cálculos de Cano, es que el mayor déficit se habría registrado el año pasado, cuando alcanzó los $155.576.019.
El exsecretario de Hacienda del primer mandato del jefe comunal recapituló, en el marco del expediente, su paso por esta cartera, entre diciembre de 2007 y junio de 2008, e hizo especial hincapié en su alejamiento de la misma.
El candidato a concejal recordó que dejó el cargo porque no compartía algunas de las acciones llevadas adelante por Pulti -como condonar deuda a las empresas pesqueras- y por omisión de otras en base a “afinidades políticas”.
De hecho, Cano calificó a la gestión del intendente como “la media década perdida” y acusó a la misma de “malversar los recursos afectados”, “aumentar el endeudamiento” y ejercer una “contabilidad creativa” para “disimular el déficit y la deuda”.
Entre estas “manifestaciones”, enumeró el “no contabilizar gastos importantes, como redeterminaciones de precios, y reconocerlos con demora y hacerlo como deuda de años anteriores”; “no computar como egresos o gastos los pagos de la deuda pero sí registrar como ingresos las tasas de ejercicios anteriores” y “derivar déficits de la administración central a los entes descentralizados, práctica que fuera observada por el Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires”.
En definitiva, Cano justificó la necesidad de modificar totalmente la forma actual en que se confecciona el Presupuesto en el “déficit sostenido” durante los 5 años del actual gobierno y la pérdida de la “autonomía económica-financiera”, entre otros puntos.
BASE CERO
El planteo de Arroyo y Cano reside, simplemente, en implementar un sistema presupuestario que exija justificar detalladamente tanto la totalidad de las peticiones presupuestarias, como cada importe a gastar.
Esto permitiría “reformular ingresos y gastos”, ya que una “célula básica” del concepto de Presupuesto Base Cero, es lo que se denomina el “paquete que decisión”. Se trata de un documento que “identifica y describe una actividad específica, de manera que la superioridad pueda evaluarla y clasificarla de acuerdo con las demás actividades que compiten por obtener recursos” y “decidir si se aprueba o no”.
Así, este mecanismo se utilizaría para “controlar el gasto”, aunque se aclaró que no es una técnica dirigida a disminuir el mismo, sino a “gastar mejor”.
Se establece de esta forma que cada área, al momento de presentar su presupuesto, exponga en detalle cada una de las erogaciones, “como si fuera la primera vez que las lleva a cabo y no como incrementales de presupuestos”. También se deben plantear alternativas operativas de cumplimiento y “niveles de esfuerzo”.
VENTAJAS DEL SISTEMA
Entre los beneficios de la propuesta, Cano señaló que:
• Se detalla el nivel de gasto por actividad
• Permite “reducir el presupuesto” sin afectar “actividades prioritarias”
• Los recursos son derivados a las actividades de “mayor gravitación”
• Permite “reducir costos sin alterar el nivel operativo”
• Mejora el proceso de planteamiento
• Estimula la innovación y creatividad
LIMITACIONES
Los inconvenientes enumerados fueron:
• Aumento de la documentación
• Dificultades en la preparación y calificación de “paquetes de decisión”
• Aprensión del personal
ANÁLISIS LEGISLATIVO
El proyecto de ordenanza elevado por el concejal Arroyo sólo tiene giro a la comisión de Hacienda, cuya flamante presidente es la edil Débora Marrero, quien reemplazó en el cargo a Leandro Lasernatras su asunción en Cultura.
La gran desventaja de la Agrupación Atlántica, en el marco del análisis que deberá realizar el Cuerpo, no es sólo la mayoría oficialista que podría bloquear cualquier intento de esta naturaleza, sino también el momento elegido para presentar la propuesta.
Es que, por ley, la administración central y los entes descentralizados tienen hasta el último día hábil del mes de octubre para presentar los respectivos presupuestos al Concejo.
Aunque cada año la administración pide prórrogas y tanto la elevación de los documentos como su tratamiento se ven seriamente atrasado, -más las particularidades de los tiempos electorales-, lo cierto es que la gestión ya tendría que estar en medio del proceso de elaboración de las cuentas y las proyecciones para el 2014.
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