La dirección del astillero denunció que hubo agresiones y usurpación. Frente a la medida del Sindicato de Obreros Navales (Saon), que lleva más de dos meses bloqueando las puertas, creen que “alguien está detrás de ese predio”
“Crónica de un atropello”. Así titularon los directivos del Astillero Unión un comunicado de prensa, que da detalles pormenorizados de las amenazas, agresiones y usurpación de la empresa por parte de un grupo de afiliados al Sindicato de Obreros Navales (Saon), que desde hace más de dos meses mantiene paralizado el trabajo.
A la denuncia por amenazas presentada a principios de agosto -que integra el Sumario 131/13, que se tramita en la sede de la Coordinación General de Mediación Penal a cargo de Sergio Irigoin-, se sumó a fines de septiembre una nueva presentación ante la fiscalía Nº4 por la usurpación, que pudo constatar la Prefectura.
El acceso al astillero se encuentra bloqueado desde el 7 de agosto, cuando un grupo personas, en su mayoría afiliados al Saon, agredieron al nuevo presidente del Directorio, César Briatore, y montaron una carpa que todavía permanece en el lugar. A esto se suma que la puerta de la empresa permanece abierta. “Nadie controla si se llevan algo o no se llevan nada”, cuestionó el titular del Astillero, quien sostuvo: “Dicen que están cuidando la empresa, pero la están arruinando”.
La incongruencia del piquete cuando estaban los salarios al día y los 51 obreros efectivizados, permiten que surjan distintas conjeturas sobre el porqué de la medida de fuerza: “Creemos que alguien está detrás de ese predio”. Se trata de la parcela 28-A, situada en el corazón del puerto local.
Por otro lado, Briatore planteó lo curioso de que ni Prefectura -alertada por las situaciones de violencia que se cometen a apenas veinte metros de su sede- ni el Ministerio de Trabajo, donde se hicieron presentaciones por la situación y podría haber dictado al menos la conciliación obligatoria, hayan actuado.
Otra situación tiene que ver con la falta de respuestas claras por parte del Consorcio Portuario. “No se expide sobre si se renovará el permiso de uso de suelo o no”, advirtió el director del Astillero Unión.
Objeciones con la empresa no tiene: “Al Consorcio le ingresa una importante cantidad de dinero a través del canon que cobra a la empresa por estar dentro del predio industrial”, contempló Briatore. Cada mes, el Astillero Unión abona 48 mil pesos. “No sé cuántas empresas están al día como nosotros”, apuntó.
Y al mismo tiempo, el Consorcio Portuario exhibe desde el mes pasado en su página web -dentro de la pestaña “Llamado presentación propuesta”- la posibilidad de que interesados en ocupar ese predio puedan acudir a las oficinas de la Gerencia de Explotación y Marketing. Aunque aclara: “Posee derecho de preferencia a favor de la firma Astillero Unión S.A.”.
De hecho, desde octubre de 2012 está solicitando al Consorcio la renovación del permiso de uso de suelo, sin obtener respuestas claras al respecto.
“Será la justicia la encargada de determinar las responsabilidades de todos quienes no hicieron lo que debieron hacer en esta situación”, aseguró Briatore.
“De todas maneras -dijo- queremos hacer esta denuncia pública de este verdadero atropello impulsado por un sindicato que no tiene potestad para cuestionar a los nuevos directivos de la empresa y está empecinado, junto a otros actores del puerto, a trabar cualquier posibilidad de crecimiento del astillero que venga de la mano de la gestión de los propios trabajadores”.
“Crónica de un atropello”. Así titularon los directivos del Astillero Unión un comunicado de prensa, que da detalles pormenorizados de las amenazas, agresiones y usurpación de la empresa por parte de un grupo de afiliados al Sindicato de Obreros Navales (Saon), que desde hace más de dos meses mantiene paralizado el trabajo.
A la denuncia por amenazas presentada a principios de agosto -que integra el Sumario 131/13, que se tramita en la sede de la Coordinación General de Mediación Penal a cargo de Sergio Irigoin-, se sumó a fines de septiembre una nueva presentación ante la fiscalía Nº4 por la usurpación, que pudo constatar la Prefectura.
El acceso al astillero se encuentra bloqueado desde el 7 de agosto, cuando un grupo personas, en su mayoría afiliados al Saon, agredieron al nuevo presidente del Directorio, César Briatore, y montaron una carpa que todavía permanece en el lugar. A esto se suma que la puerta de la empresa permanece abierta. “Nadie controla si se llevan algo o no se llevan nada”, cuestionó el titular del Astillero, quien sostuvo: “Dicen que están cuidando la empresa, pero la están arruinando”.
La incongruencia del piquete cuando estaban los salarios al día y los 51 obreros efectivizados, permiten que surjan distintas conjeturas sobre el porqué de la medida de fuerza: “Creemos que alguien está detrás de ese predio”. Se trata de la parcela 28-A, situada en el corazón del puerto local.
Por otro lado, Briatore planteó lo curioso de que ni Prefectura -alertada por las situaciones de violencia que se cometen a apenas veinte metros de su sede- ni el Ministerio de Trabajo, donde se hicieron presentaciones por la situación y podría haber dictado al menos la conciliación obligatoria, hayan actuado.
Otra situación tiene que ver con la falta de respuestas claras por parte del Consorcio Portuario. “No se expide sobre si se renovará el permiso de uso de suelo o no”, advirtió el director del Astillero Unión.
Objeciones con la empresa no tiene: “Al Consorcio le ingresa una importante cantidad de dinero a través del canon que cobra a la empresa por estar dentro del predio industrial”, contempló Briatore. Cada mes, el Astillero Unión abona 48 mil pesos. “No sé cuántas empresas están al día como nosotros”, apuntó.
Y al mismo tiempo, el Consorcio Portuario exhibe desde el mes pasado en su página web -dentro de la pestaña “Llamado presentación propuesta”- la posibilidad de que interesados en ocupar ese predio puedan acudir a las oficinas de la Gerencia de Explotación y Marketing. Aunque aclara: “Posee derecho de preferencia a favor de la firma Astillero Unión S.A.”.
De hecho, desde octubre de 2012 está solicitando al Consorcio la renovación del permiso de uso de suelo, sin obtener respuestas claras al respecto.
“Será la justicia la encargada de determinar las responsabilidades de todos quienes no hicieron lo que debieron hacer en esta situación”, aseguró Briatore.
“De todas maneras -dijo- queremos hacer esta denuncia pública de este verdadero atropello impulsado por un sindicato que no tiene potestad para cuestionar a los nuevos directivos de la empresa y está empecinado, junto a otros actores del puerto, a trabar cualquier posibilidad de crecimiento del astillero que venga de la mano de la gestión de los propios trabajadores”.
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